Hubo un tiempo (los felices 60) en que Henry Ford quiso comprar Ferrari. Enzo se negó estando las negociaciones muy avanzadas y Henry se enfadó muchisimo. De ese monumental cabreo nacieron dos autos historicos que pretendieron destronar a los cavallinos. El Ford GT40 lo consiguió en los circuitos. El Pantera no lo consiguió a nivel comercial. El sustituto del De Tomaso Mangusta era un impresionante deportivo italiano. Con un V8 de Ford y una linea espectacular pretendia poner en jaque a todo aquel que se le acercase. Un habitaculo calurosisimo, tremendos fallos de acabado, y una fiabilidad ruinosa no convencieron al gigante americano, que lo vendía en sus concesionarios en EE.UU. y Canadá, y abandonó al Pantera a su suerte. En 1971 el mismisimo Elvis Presley tiroteó al suyo harto de que no arrancase. No se lograron solventar del todo sus problemillas pero siguió evolucinando, sin pena ni gloria, como un exótico dream car hasta los ’90.
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Maybe one day in an other place than in my dreams … hope so!
You have beautiful dreams!!! Thank you for your guessed right comments. I wait for the near one
El Pantera amarillo perteneció a Elvis Presley. Fue tiroteado sin piedad despues de varios (muchos) intentos de arrancarlo. Ahora descansa, con sus heridas de guerra, en el museo Petersen.